En el contexto de la música contemporánea, ya sea en el ámbito del pop o del rock, las obras de Blackmore’s Night son, definitivamente, una rareza.

Formados en 1997, Blackmore’s Night se compone principalmente de Ritchie Blackmore (guitarra acústica, mandolina, zanfona, nyckelharpe, guitarra eléctrica) y Candice Night (voz principal, instrumentos de viento), además de un colectivo variado de instrumentistas anónimos. Unidos por su amor por la música renacentista, la pareja ha lanzado 10 álbumes de estudio, desde Shadow of the Moon de 1997 hasta Nature´s Light, publicado el 12 de Marzo del 2021, a través de earMusic.

Esta, la ya undécima obra de Blackmore’s Night, continúa la complacencia del dúo con el escalofriante folk medieval, un sonido que evoca praderas, estepas, hogueras, cervezas, caballeros, elfos y tradiciones. El álbum se abre con el que fue su primer single: el alegre “Once Upon December”, un tema iluminado por la luna y que sin duda es perfecto para una reunión de corral de espíritus libres de ideas afines.

A continuación, en un estado de ánimo similar aunque un poco más elegante, está el melódico “Four Winds”.

Es hora de pasar las jarras de cerveza y malvaviscos asados ​​mientras el melodrama de “Feather in the Wind” perdura con la brisa de la noche.

La noche se vuelve seria y sombría cuando Blackmore’s Night ofrece algo inicialmente inquietante y etéreo: una balada instrumental lenta, empapada de órganos y orquestada con cuerdas, y casi canto fúnebre, “Darker Shade of Black”, que luego se convierte en un himno épico.

Los benevolentes juerguistas descansan momentáneamente la espalda contra los árboles mientras la brasa arde constantemente y los juglares tocan el vals “The Twisted Oak”. Después, la banda invita a su audiencia a lo más destacado de la juerga: la parte de la narración en la forma de una gran mezcla auditiva de la canción principal, como si diera la bienvenida a la llegada de algo real y elevado.

Obviamente, rindiendo homenaje a sus raíces con Deep Purple y Rainbow, Blackmore´s Night se lanza junto al resto de trovadores a por “Der-letzte-Muzketier [The Last Musketeer]”, una mezcla de blues, clásico, guitarra eléctrica y Folk,

para después despertar a sus ahora relajados juerguistas con una electrizante canción de anhelo titulada, “Wish You Were Here”.

Y llegando a la recta final del álbum, “Going to the Faire” es una canción de viaje y aventuras, en medio de una sinfonía de instrumentos de cuerda y un festival de peregrinos de cabellos de flores.

Para terminar, el álbum concluye su caravana de deleite con el medio tiempo “Second Element”, donde el virtuosismo de la guitarra de Blackmore y la poderosa y rústica voz de Night brillan hasta el final.

En esta época de pop bailable y rock agresivo, que, para ser justos, son obras de arte sónico igualmente atractivas, la nueva y convincente incorporación de Blackmore’s Night a su obra es verdaderamente indispensable. Está listo para saciar tanto el intelecto como el espíritu.

Sigue a Blackmore’s Night

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