En el infinito universo del cómic, uno en el que, como el de los libros de cualquier clase y género, a una sola persona en cien vidas no le daría tiempo de leerlos todos, siempre es una agradable sorpresa ver aparecer tebeos que conoces desde hace mucho tiempo y sobre el que siempre te preguntas si algún día se editará en castellano. Pues bien, Alicia en el País de los Monos es uno de esos casos en los que el siempre valioso trabajo reconociendo talento y pequeñas obras maestras de la incansable editorial Nuevo Nueve, ha hecho que por fin se edite en España en un solo tomo la trilogía completa de esta historia ideada por el talento narrativo siempre desatado de Tebo al guion, el extraordinario trazo de línea clara de Keramidas y la más que vistosa y esencial aportación al color en este caso de Nob en el Libro I, Tarquin & Torta en el Libro II y Torta en el Libro III. Originalmente publicada en Francia entre 2012 y 2015, Nuevo Nueve completa ahora el fallido intento del desaparecido sello EDT (sucesores de Glénat España), que llegó a publicar hace más de una década (julio de 2012) tan sólo el primer tomo que, como entenderéis leyendo la historia del tirón al fin, nos dejó con la miel en los labios en su día a los aficionados al mejor y más espectacular cómic europeo.

Alicia en el País de los Monos es una original y alocada sucesión de aventuras encadenadas a partir de un personaje tan universalmente conocido como abierto a nuevas posibilidades creativas como bien demuestra Tebo en esta portentosa trilogía. Retomando al personaje en su archiconocido «país de las maravillas», un accidente de lo más tonto lleva a Alicia, corriendo siempre detrás del conejo blanco, a ser golpeada por un coco en la cabeza. Aturdida por el golpe, la niña retoma su mala costumbre de caer por un agujero sin aparente fondo apareciendo de repente en mitad de una espesa selva de la que surgen innumerables monos que la confunden nada menos que con… Tarzán. Por suerte para ella pronto entrará en escena Eddy, un mandril parlante que, sin quererlo, comienza a ayudar a Alicia, en especial porque el golpe en la cabeza no sólo la ha llevado allí sino que también le ha hecho perder temporalmente la memoria y, podría ser, parte de su cordura ya que en esa selva, que Eddy presenta como «El país de los monos», su nuevo rey tras la marcha de Tarzán por vacaciones es un enorme tigre determinado a acabar con la niña a la que animales y selva confunden con Tarzán.

A lo largo de numerosas entrevistas aparecidas cuando, hace más de 10 años, se estrenó la serie en Francia, Keramidas recordaba entonces el origen de esta laboriosa y visualmente espectacular colaboración: «durante una conversación con Patrick Hourcade (director editorial del sello Drugstore de Glénat en Francia), le comenté que estaba abierto a colaborar con Tebo , a quien conocía… Todo esto ocurrió en Angoulême. Tebo es una persona muy reflexiva y con una mente ágil. Si bien le gustó mi trabajo en La Mazmorra, lo que estaba haciendo en Luuna no encajaba del todo con su estilo… Así que creó una historia a medida para mí sobre animales, ambientada en un bosque, y, dado que yo había trabajado en Disney, pensó: «Intentaré encontrarle un personaje al estilo Disney». Así nació Alicia. Esa misma noche, de regreso de Angoulême, tuvo la idea: Alicia en el País de los Monos. Su concepto: el personaje principal es, más que Alicia, el propio País de los Monos…, una especie de «centro» para todos los cuentos de hadas…»

De ese modo y, siguiendo una estela que muchos otros autores han aprovechado en sus obras, revisitando el universo de los cuentos infantiles en una confluencia única donde se dan cita esos personajes por todos conocidos, Tebo nos lleva a explorar el país de los monos casi como excusa para evidenciar su inagotable imaginación, capaz de sustituir los espejos de Alicia por insospechadas formas en las que les es posible a sus personajes desplazarse de un mundo fantástico a otro y viceversa. Y así, aunque dándole una más que original vuelta de tuerca a un fenómeno que hizo especialmente popular el personaje de Shrek, nacido en los libros ilustrados de William Steig en los 90 y que se convirtió en exitosa franquicia de películas en los años 2000, elevando esta categoría en nuevo género, Tebo nos lleva de la mano de la Alicia más aventurera que puedas imaginar y su buen amigo Eddy el mandril a mezclarse también con el país de Nunca Jamás con una visión del capitán Garfío y de Peter Pan que nunca hubieses creído posible e incluso, más allá, en el Libro III, nos hace viajar a un tremendo baile de personajes inesperados que preferimos descubras y disfrutes leyendo este divertidísimo tomo integral, cuidadosamente editado con su cuidado habitual por Nuevo Nueve en un vistoso y manejable tomo de 164 páginas en formato tapa blanda de 19×27 cm.

Si el talento narrativo gráfico de Keramidas es excepcional, unido al detallismo de Tebo, que además también es dibujante, la suma nos ofrece un relato tan medido y perfecto que te aseguro que, una vez inicies la lectura de Alicia en el País de los Monos no podrás dejarlo hasta la última página. «Como Fred (Tebo) también suele escribir para sí mismo -afirmaba Keramidas–, no sigue el método habitual: sinopsis, guion gráfico y luego diálogos. Tiene su propio método: una hoja con pequeñas viñetas que describen todas las escenas, como en un libro infantil. El libro entero ya está ahí. Una vez que examinamos esta situación y le proporcioné mis sugerencias y observaciones, reescribió todo el libro como si fuera un guion teatral, sin ninguna indicación de puesta en escena. Tiene un aspecto muy laborioso, pero es un proceso de escritura necesario para seguir adelante. Es entonces cuando te das cuenta de que no deja nada al azar».

Porque desde que abres la primera página de Alicia en el País de los Monos no dejan de pasar cosas ni una sola viñeta. Y Tebo es capaz de sorprendernos, engañarnos con giros de guion absurdos, hacernos reír (muchísimo) y disfrutar de una agotadora travesía que transcurre entre sus ideas originales y personajes populares de cuentos con los que prácticamente todas las generaciones de los últimos dos siglos hemos crecido de una manera u otra. Y saborear de nuevo esos recuerdos, habitualmente dulces e inocentes, es una experiencia que recomendamos prácticamente a todas las edades, aunque Tebo haga hablar a sus personajes con una franqueza que los hace casi reales. El libro se cierra además con las vistosas y coloridas portadas originales que sirvieron a los tomos individuales en los que se editó la historia en Francia, convirtiendo en experiencia especialmente sensorial, inolvidable e imprescindible la lectura de principio a fin.


SOBRE LOS AUTORES

TEBO
Frédéric Thébault alias Tebo, publicó sus primeros dibujos en el diario Ouest-France. Hace su entrada en la publicación Tchô! en 1999 donde creó Samson y Néon. En Tchô! dio vida también al formidable Capitán Biceps con la ayuda de Zep en el guión. También le debemos La Bande à Fred, publicada por la revista mensual D Lire desde 2002. En 2006, publicó su primer historia larga, que no fue otra que el volumen 6 de su serie Samson y Néon. En 2007, su sueño de dibujar con Gotlib se hizo realidad en una edición especial de Tchô!, en la que competían Superdupont y Capitán Biceps. En 2008, todavía con Zep en el guión, produjo imágenes para el álbum Comment Dessiner?. El mismo año ilustró el libro In Caca Veritas escrito por los médicos estadounidenses Josh Richman y Anish Shet. También en 2008, dibujó 8 páginas para la serie de ciencia ficción Les Chroniques de Sillage, en el volumen 6 escrito por Jean-David Morvan. En 2010, Samson y Néon se convirtió en una serie de animación transmitida por France 3 y Canal J (la serie está producida por Toon Factory). Lo mismo ocurre con la serie Capitán Biceps transmitida por France 3 y producida por Futurikon. Comix Buro publica un Sketchbook dedicado a Tebo, que reúne múltiples ilustraciones nuevas. El mismo año, escribió el guión de Alicia en el país de los monos, dibujado por Keramidas. En 2011, se unió a Yoann, Cyril Pedrosa, Julien Neel, Guillaume Bianco y Alfred para participar en L’atelier Mastodonte creado por Lewis Trondheim. El mismo año fue invitado al volumen 2 del Principito (de Glénat) donde escribió algunas páginas sobre el tema de un planeta hamburguesa. En 2017 recibió el Premio de la Juventud en el festival de Angoulême por La jeunesse de Mickey.

KERAMIDAS
Nicolas Keramidas obtuvo primero su bachillerato en ilustración en Grenobles, Francia, antes de graduarse en animación en la Escuela de los Gobelinos de París. En 1993, comenzó a trabajar para los Estudios Disney de Montreuil, al tiempo que realizaba trabajos de publicidad para la ciudad de Grenobles. A finales del año 2000, Nicolas presentó un proyecto a la editorial Soleil protagonizado por Luuna, una niña que vive en la prehistoria. Posteriormente conoció a Didier Crisse y juntos transformaron a Luuna en una joven nativa americana, creando así la primera serie de Nicolas, publicada por Soleil. Actualmente, la serie de Luuna cuenta con siete libros. Junto con Arleston, Nicolas creó Tykko des sables, una serie de tres volúmenes también publicada por Soleil. Más tarde, trabajó en un libro de la serie La Mazmorra, escrita por Joann Sfar y Lewis Trondheim, y publicada por Delcourt. En 2012, junto con Tebo, lanzó la trilogía Alicia en el país de los monos, publicada por Glénat en Francia y ahora por Nuevo Nueve en España. A Coeur Ouvert (Corazón Abierto) es su primer libro publicado por Dupuis, el valiente relato autobiográfico de un episodio de su vida que pocos conocían: tras someterse a una cirugía a corazón abierto en su infancia, volvió a afrontar esta formidable prueba cuarenta y tres años después. Dolor, sufrimiento y soledad, pero también amor, esperanza y humanidad, impregnan esta novela gráfica casi indispensable.



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