A la poco conveniente avalancha natural de novedades de cómic, novela gráfica y manga que inundan mensualmente cualquier tienda de cómics, lo contrarresta la imparable cantidad de talento por página y título que llega a nuestro mercado como parte infinitesimal de la producción mundial de viñetas. Llevamos una semana constatando en particular el talento de mujeres que, o han logrado ya su lugar y hueco entre los nombres a no olvidar, o bien lo van a lograr con obras tan increíbles como las que hemos tenido la suerte de leer y recomendaros en estos últimos días. Y la de hoy no es una excepción. De hecho, Vals de los grandes almacenes, aunque editado en el formato y tamaño más estándar y habitual del manga es, en realidad, un libro de arte con todas las páginas a color que encierra en tan reducidas dimensiones la entrada al intrincado, detallista y elaborado arte de la autora en este caso japonesa Hiromi Matsuo.
Haciendo honor al repertorio infinito de temas reconstruidos en viñetas por autoras y autores de manga, Hiromi Matsuo nos lleva curiosamente al interior de unos grandes almacenes como excusa para alternar páginas de narrativa manga en historias de los personajes de los diferentes departamentos y plantas, mezclados con páginas donde la autora se refugia en la ilusión de vendernos productos que no existen pero sí reflejan su calidad artística extraordinaria.
Los ficticios grandes almacenes Mitsubeni son el recuerdo imposible que Matsuo sitúa en una ciudad de provincias japonesa en algún momento impreciso de principios del siglo XX. Obviando la realidad, la autora construye un mundo idílico en el que “hace más de una década los comerciantes de kimonos empezaron a operar en el negocio de los grandes almacenes. Estos productos tienen encanto, son moderno y son, también, exclusivos de nuestra tierra, que ha prosperado gracias al comercio con el extranjero. (…) Hemos construido este palacio especialmente para usted: un lugar agradable y elegante en el que poder pasearse sin prisas”. Pese a todo, lo cierto es que sí hubo un lugar robado a la realidad que motivó a la autora a explorar su primer libro de arte en unos grandes almacenes: “Uno de los recuerdos que guardo con mas mimo de cuando estuve viviendo en Kansai es el de los grandes almacenes Daimaru Shinsaibashi. El edificio principal, del diseñador William Merrell Vories, era de estilo gótico con toques orientales. Al entrar y ver esas estancias tan lujosamente decoradas, me sentía transportada a un mundo completamente diferente, un mundo en el que podía escapar de mi rutina”.
Paseando entre ilustraciones a lo largo de este pequeño gran libro editado, como decíamos, a todo color y con todo el cuidado en su edición, papel y detalles, nos sumergimos poco a poco en la mezcla que nos presenta la autora de recuerdos con una original mezcla de Modernismo teñido de influencia oriental. No es difícil hacerse una idea de las sensaciones que todavía conserva viendo sus ilustraciones: “desde la cafetería de la segunda planta, podía ver los mostradores de cosméticos y los accesorios de moda de la primera. Era una experiencia indescriptible y sin parangón. El vestíbulo del ascensor y la decoración del techo de la primera planta eran de una belleza abrumadora, y convertían la tienda en algo más que un simple centro comercial al que ir a gastar; la convertían en un lugar especial, diseñado a conciencia por y para el lujo”.
Lo que hace verdaderamente especial Vals de los grandes almacenes para el lector y, especialmente para la autora cuando construyó, íntegro, este lugar con sus dibujos es, como ella relata que “cuando comencé a trabajar en este libro de arte, me enteré de que iban a demoler a el edificio principal de Daimaru Shinsaibashi debido a su deterioro. Este proyecto se convirtió entonces en uno repleto de amor y gratitud hacia ese hermoso espacio que en aquel momento estaba a punto de perder para siempre”. Así es como las delicadas pinceladas de Hiromi Matsuo salvaron del olvido un sitio que, gracias a su cuidado trabajo, formará parte de un nuevo imaginario. De hecho, en la versión de la autora la azotea del edificio alberga incluso una noria y cada planta, techo, paredes, ascensores o escaleras son un prodigio de color, decoración y tentaciones de ocio.
Lejos de estereotipos, si además de aficionado o aficionada al cómic lo eres también del arte te invito a que, cuando la llamativa portada de este libro de arte disfrazado en formato manga te atraiga en tu tienda de cómics favorita, lo abras y te dejes llevar por su particular fusión de cómo sería el modernismo europeo más exagerado si éste tomase los colores del detallismo minimalista japonés. Si lo haces compartirás que es del todo imposible no admirar el trabajo de Hiromi Matsuo a todo color, algo que evidencia la importancia de su nombre como ilustradora en su Japón natal. Además, como mangaka tradicional destaca completamente en la elaboración de cinco relatos hiperbreves que sirven de paso entre planta y planta.
“El laberinto” es una excusa en la que una dependienta que pretende devolver un paraguas perdido a su dueña nos pasea en viñetas por infinidad de rincones de los almacenes. “El aroma de las flores de una tierra lejana” explica la presencia de toda la cartelería y publicidades que la autora dedica a los cosméticos a través de una pareja de amigas. “Un tranquilo paseo en otoño” se explaya con uno de los temas con los que evidentemente más disfruta Matsuo, que es dibujar kimonos. A la inversa, “Un primer encuentro con Occidente” le permite reimaginar la forma de vestir y moda de principios del siglo XX en Europa cuando una japonesa especialmente conservadora decide cambiar kimono por traje moderno. Y, por último, “Restaurante” es una brevísima historia de amor imaginado pero no correspondido, envuelto nuevamente en todo lo que de misterioso tiene la moda tradicional japonesa con envuelta en patrones exquisitos dibujados sobre kimonos nuevamente. En conjunto, Vals de los grandes almacenes es una experiencia visual a la que no puedes evitar volver y descubrir cada vez un matiz, un dibujo, una publicidad imaginada en el que admirar el toque de una artista sin duda única y excepcional de un nivel gráfico apabullante que para si quisieran alcanzar muchos otros dibujantes de manga.
SOBRE LA AUTORA
HIROMI MATSUO
Nacida el 4 de diciembre de 1980 en la ciudad de Matsue, prefectura de Shimane, vive en la prefectura de Okayama desde 2013. Comenzó como ilustradora independiente en 2010 y ha estado viviendo en la prefectura de Okayama desde 2013. Disfruta especialmente dibujando mujeres, adornos, kimonos y motivos clásicos. Vals de los grandes almacenes, publicado por Jitsugyo no Nihon Sha en 2016, fue un éxito excepcional para la editorial. Creadora habitual de series de calendarios con sus ilustraciones, el de este título fue muy bien recibido por los seguidores de la autora en Japón.